domingo, 2 de octubre de 2016

Se acerca el invierno... y la gripe



Se acerca el invierno y con él, la gripe y es hora de recordar algunos consejos.
 
¿Qué es la gripe?

La gripe es una enfermedad, producida por un virus, más frecuente en otoño e invierno

Esta enfermedad puede afectar a cualquier persona. Pero hay colectivos que sufren en mayor medida las consecuencias de la gripe. Se trata de las personas mayores y de las personas que tienen otros problemas de salud (diabetes, EPOC, enfermos renales o hepáticos, etc.). En estos casos la enfermedad puede complicarse y, por ello, es muy recomendable que este colectivo de riesgo se vacune.

No es recomendable utilizar antibióticos para hacer frente al virus. Lo adecuado en el caso de tener la gripe, es llevar a cabo medidas de apoyo, es decir, utilizar antitérmicos, guardar cama e hidratarse bien.

Suele iniciarse de forma brusca, con fiebre alta (más de 38º C). Además, suele ir acompañada de escalofríos, malestar general, dolor de cabeza, dolores musculares y articulares, lagrimeo, tos... que suelen durar entre 5 y 8 días.

El virus se transmite de persona a persona, principalmente por el aire, a través de las gotitas de saliva y secreciones nasales que expulsa una persona al toser, al hablar o al estornudar y que quedan dispersas en el aire, en las manos o en las superficies.

Las personas pueden contagiarse directamente por inhalación de microgotas procedentes de una persona infectada o indirectamente por tocarse los ojos, la nariz o la boca después de haber tocado las microgotas infectadas que han quedado en las manos o depositadas en superficies.

Medidas para evitar el contagio

·        
Permanezca el menor tiempo posible cerca de personas con síntomas de gripe.
·         No es recomendable que las embarazadas cuiden personas con gripe.
·         Limpie sus manos frecuentemente, lavándolas con agua y jabón.
·         Permanezca el menor tiempo posible en lugares muy concurridos.
·         Mejore la renovación del aire en el hogar, abriendo las ventanas con frecuencia.
·         Vacunarse si pertenece a alguno de los grupos de riesgo

La vacuna contra la gripe

Las vacunas frente a la gripe son la medida más eficaz para prevenir la enfermedad y, aunque la vacuna no evita la infección en todos los casos, sí reduce la intensidad de la enfermedad y las complicaciones de la misma.

Las vacunas antigripales son de tipo inactivado, son seguras y se puede administrar a mujeres embarazadas.

Cada año el Departamento de Sanidad y Consumo y Osakidetza realizan una campaña de vacunación antigripal dirigida a personas a partir 65 años y a población que pertenece a grupos de riesgo.

Grupos de riesgo para la vacuna de gripe estacional

·         Adultos de 65 años o más.
·         Menores de 65 años que presenten:
o   Obstrucción Crónica del Flujo Aéreo (O.C.F.A.)
o   Diabetes.
o   Cardiopatía crónica.
o   Enfermedad hepática crónica.
o   Enfermedad renal crónica.
o   Otras patologías de carácter crónico.
o   Pacientes con terapia inmunosupresora.
o   Mujeres embarazadas.
o   Niños/as con drepanocitosis y otras hemoglobinopatías.
o   Niños/as que reciben tratamiento de larga duración con ácido acetil salicílico.
·         Personal sanitario.
·         Trabajadores de granjas avícolas.

¿Qué debo hacer si tengo gripe?


Permanezca en el hogar, no acuda al trabajo, a la escuela o a lugares concurridos al menos hasta 24 horas después de la desaparición de la fiebre sin usar medicamentos que la bajen.
 
Manténgase a la mayor distancia posible (como mínimo 1 m) de las personas que no presentan síntomas.
 
Al toser o estornudar cúbrase bien la boca y la nariz con el codo o con un pañuelo para retener las secreciones respiratorias.
 
Use preferentemente pañuelos desechables para sonarse los mocos y tírelos nada más usarlos.
 
Lávese las manos a menudo con agua y jabón para evitar la transmisión de los virus y siempre después de toser, estornudar y sonarse.
 
Renueve el aire del recinto donde se encuentre abriendo las ventanas con frecuencia.
 
Puede tomar analgésicos o antitérmicos para el dolor de cabeza o la fiebre.
Nunca tome antibióticos por su cuenta; si fuesen necesarios, su médico se los recetará.


¿Cuándo solicitar atención médica?

En caso de niños o niñas de corta edad, si observa:
·         Respiración rápida o dificultad para respirar.
·         Erupciones en la piel.
·         Los síntomas de la gripe mejoran al principio, pero luego vuelven a aparecer.
·         No quieren comer o no tienen ganas de nada (jugar, moverse…).



Personas adultas, si nota:
·         Dificultad para respirar.
·         Dolor o presión en el pecho o abdomen.
·         Mareo persistente.
·         Estado de confusión.
·         Fiebre de más de 38º durante cuatro días.

Si pertenece a alguno de los siguientes grupos de riesgo:
·         Mujeres embarazadas.
·         Enfermedades cardiovasculares crónicas (excluyendo la hipertensión).
·         Enfermedades respiratorias crónicas (incluyendo displasia bronco-pulmonar, fibrosis quística y asma moderada-grave persistente).
·         Diabetes mellitus tipo I y tipo II con tratamiento farmacológico.
·         Insuficiencia renal moderada-grave.
·         Hemoglobinopatías y anemias moderadas-graves.
·         Asplenia.
·         Enfermedad hepática crónica avanzada.
·         Enfermedades neuromusculares graves.
·         Pacientes con inmunosupresión (incluida la originada por infección por VIH o por fármacos o en los receptores de trasplantes).
·         Obesidad mórbida (índice de masa corporal igual o superior a 40).
·         Niños/as y adolescentes, menores de 18 años, que reciben tratamiento prolongado con ácido acetilsalicílico, por la posibilidad de desarrollar un síndrome de Reye.

sábado, 23 de abril de 2016

Y si no voy a urgencias… ¿Dónde voy?



PAC Indautxu

La gran mayoría de personas que acuden a las urgencias hospitalarias son conscientes de que no tienen una enfermedad grave que pone en peligro su vida.

Según datos del Ministerio de Sanidad (2011) el sistema público atendió 20,6 millones de urgencias hospitalarias, y 27 millones de urgencias en los centros de salud, es decir casi el 50% de la población española utilizó este recurso.

La mayoría de las urgencias que se atienden hoy en día en los hospitales suelen ser procesos banales, que duran poco tiempo, se resuelven solos sin que haya que poner ningún tratamiento, no suelen necesitar ninguna prueba complementaria y en más de un 95% de casos son dados de alta a su domicilio sin tener que ser ingresados. El atender procesos no urgentes hace que se atienda más tarde procesos que si lo son.

En caso de necesidad de atención médica inmediata, además de en el Servicio de Urgencias del Hospital, hay otros centros donde puede ser atendido:
 
PAC Rekalde
En el Centro de Salud:
Salvo los Centros de Salud de Alonsotegi, Arangoiti y Altamira, cuyo horario de apertura es de 8:00 a 15:00 horas, todos los centros de salud de Bilbao están abiertos de 8:00 a 20:00 horas. Ante un problema de salud urgente usted puede acudir a cualquiera de ellos.

En los Puntos de Atención Continuada (PAC):
Los PAC (Puntos de Atención Continuada) prestan atención sanitaria en algunos centros de salud cuando cierran los mismo y son atendidos por personal del servicio de Emergencias.
Estos son los horarios de atención:

De Lunes a Viernes:
- PAC Rekalde, abierto de 20:00 a 12 de la noche
- PAC Deusto, abierto de 20:00 hasta las 8:00 del dia siguiente.

Sábados:
- PAC Zorroza, PAC Basurto, PAC Casco Viejo y PAC Txurdinaga están abiertos de 9:00 a 14:00 horas.
- PAC Begoña, PAC Rekalde, PAC Indautxu (Dr.Areilza) y PAC Santutxu – Solokoetxe están abiertos de 9:00 a 12 de la noche.
- PAC Deusto, está abierto durante todo el dia

Domingos y festivos
- PAC Begoña, PAC Rekalde, PAC Indautxu (Dr.Areilza) y PAC Santutxu – Solokoetxe están abiertos de 9:00 a 12 de la noche.
- PAC Deusto, está abierto durante todo el dia

En este enlace tienes las direcciones de todos ellos:  
http://www.bilbao.net/inmigracion/gestion.asp?codges=6103&i=es

PAC Deusto
En caso de que su estado de salud no le permita desplazarse a ningún centro, tiene también varias opciones:

- Teléfono de Consejo sanitario (902 20 30 20), atendido por personal de enfermería las 24 horas del dia los 365 dias del año.

- Su centro de salud: Existe la posibilidad de hacer una consulta con su médico por teléfono, y en caso necesario su médico puede desplazarse a su domicilio.

- Teléfono de emergencias (944 10 00 00). Puede contactar con el servicio de emergencias en el horario en que su médico no está en consulta si necesita que un facultativo le visite a domicilio por motivos de urgencia. Este servicio de emergencias funciona de las 17:00 a las 8:00 horas del dia siguiente de lunes a viernes y durante todo el dia los sábados, domingos y festivos. Fuera de ese horario debe contactar con su centro de salud.

Si usamos bien los recursos evitaremos la masificación y la atención a los problemas graves será mejor.

sábado, 13 de febrero de 2016

Documento de Voluntades Anticipadas: Decidir para cuando no puedas decidir

Toda persona adulta, capacitada, en ausencia de coacciones y debidamente informada, tiene derecho a decidir si acepta o no un determinado tratamiento, a decidir lo que considera bueno para si mismo, incluso en contra de la opinión médica.
Las voluntades anticipadas constituyen un proceso en el que la persona planifica los cuidados de salud que desea recibir o rechazar en el futuro, en particular en el momento en que no sea capaz de tomar decisiones por sí mismo. Aunque la voluntad del paciente puede ser expresada de modo oral, quedando constancia de ella en la historia clínica, el mejor modo de asegurar su cumplimiento en cualquier circunstancia es hacerlo a través de los denominados Documentos de Voluntades Anticipadas (DVA).
 
¿Qué es un Documento de Voluntades Anticipadas (DVA)?
Es un documento escrito dirigido al médico responsable en el que una persona mayor de edad, que no haya sido incapacitada judicialmente para ello, de manera libre y de acuerdo a los requisitos legales, expresa las instrucciones a tener en cuenta cuando se encuentre en una situación en la que las circunstancias que concurren no le permitan expresar personalmente su voluntad. En este documento la persona también puede designar un representante o varios, que será el interlocutor válido y necesario con el médico o equipo sanitario, y que le sustituirá en el caso que no pueda expresar su voluntad por sí misma.
El médico responsable, el equipo sanitario y el sistema de atención sanitaria están obligados a tenerlo en cuenta y a aplicarlo de acuerdo a lo establecido en la ley
 
¿Qué se puede expresar en un DVA?
Los valores y opciones personales respecto a los momentos finales de la vida u otras situaciones de grave limitación física o psíquica. También pueden especificarse otras consideraciones, como por ejemplo la elección del lugar (hospital, domicilio) donde se desea recibir los cuidados en el final de la vida, la voluntad de ser donante de órganos, el deseo de recibir asistencia religiosa o no, si se es contrario a que se practique la autopsia, si se desea donar el cuerpo para estudios anatómicos, etc
 
Instrucciones y límites referidos a las actuaciones médicas ante las situaciones previstas, es decir qué quisiera y qué no quisiera la persona respecto a tratamientos y cuidados en caso de incapacidad temporal o definitiva. Así, por ejemplo, se puede solicitar que no sean aplicadas (o se retiren, si ya se han aplicado) medidas de soporte vital tales como: reanimación cardiopulmonar, diálisis, conexión a un respirador, nutrición e hidratación artificiales para prolongar la vida.
 
La designación de un representante, o varios, para que actúe como interlocutor válido ante el equipo sanitario en el caso de que el paciente no pueda expresar su voluntad y para que lo sustituya en la interpretación y cumplimiento de las instrucciones.
 
Existen diferentes modelos de DVA que en cualquier caso pueden servir de ayuda para la elaboración de un escrito individualizado, fruto de una reflexión personal y de un proceso de comunicación con el profesional sanitario. Al final de este post se puede acceder a uno de los modelos posibles.
 
¿Cuándo es válido un DVA?
Un DVA será válido cuando esté firmado por una persona mayor de edad, con capacidad legal y que actúe libremente.

El DVA debe estar formalizado por escrito de uno de estos tres modos:
• ante tres testigos (los testigos serán personas mayores de edad, con plena capacidad de obrar y no vinculadas con el otorgante por matrimonio, unión libre o pareja de hecho, parentesco -hasta segundo grado- o relación patrimonial alguna). Conviene que los testigos conozcan el contenido del documento y se aseguren de que éste se corresponde con la voluntad libre e informada de la persona.
• ante notario.
• ante el funcionario o empleado público encargado del Registro Vasco de Voluntades Anticipadas. Dicho Registro se encuentra en la Dirección de Estudios y Desarrollo sanitario del Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco en Vitoria-Gasteiz.Tel.: 945 01 92 54; e-mail:registrodevoluntadesanticipadas-san@ej-gv.es
 
El DVA se puede modificar, sustituir o revocar en cualquier momento.
 
El DVA se podrá aplicar cuando la persona pierda su capacidad, su libertad de actuación y su posibilidad de expresarse. En el caso de que la persona sea competente, en el momento en que haya de tomarse la decisión sanitaria, lo expresado por la persona prevalecerá sobre las instrucciones contenidas en el DVA.
 
Es aconsejable que el DVA, una vez confeccionado, también se inscriba en el Registro Vasco deVoluntades Anticipadas para que sea más fácil que los profesionales sanitarios lo conozcan en el momento en que sea necesaria su aplicación.
 
Recomendaciones para las personas que quieran realizar un DVA o ya lo tengan hecho
• Consulte a su médico de familia y comente con él el contenido del documento.
También su médico especialista y las asociaciones de enfermos pueden ser de gran ayuda si padece o tiene riesgo de padecer una enfermedad incapacitante concreta. Ellos son los que mejor le pueden asesorar sobre la evolución de una enfermedad y las consecuencias de tomar una u otra decisión.
• Es conveniente que se deje constancia escrita del DVA en la historia clínica para que sea tenido en cuenta con más facilidad, para ello quien lo tenga realizado deberá facilitar una copia a su médico.
• Comente con sus familiares más próximos y con el representante que ha elegido los puntos fundamentales del documento que ha realizado; eso facilitará que sus deseos sean respetados cuando no pueda manifestarlos.
• Tenga en cuenta que aunque usted lo manifieste no se pueden realizar actuaciones en contra de la ley. Tampoco debe rechazar tratamientos concretos de forma general sin estar bien informado.
• Es conveniente releer el documento cada cierto tiempo para ver si sigue de acuerdo con lo que está escrito. En caso contrario tendrá que modificarlo según sus nuevos deseos.
• La forma en que se asegura que el DVA pueda estar disponible en el País Vasco cuando se necesite, es inscribiéndolo en el Registro de Voluntades Anticipadas